Sistemas que participan de la nutrición.
Sistema Circulatorio. (8° año)
Sistema circulatorio: características y funciones
Como tomar el pulso.
Como una gran autopista que comunica todas las
ciudades de un país y, a través de pequeños e
intrincados caminos, los lugares más alejados, el
sistema circulatorio se encarga de trasladar los
elementos básicos que necesita nuestro cuerpo
para funcionar.
Además, también se preocupa de servir de medio para
sacar los desechos, para que circulen las hormonas que
inhiben o estimulan funciones básicas y, más aún, facilita
sus caminos para que actúen los sistemas defensivos
del organismo. Incluso, se preocupa de mantenerse a
una temperatura adecuada, pues sus variaciones también afectan al resto de nuestro cuerpo.
Para que esta supercarretera funcione y cumpla con sus misiones de alimentación, defensa y control de diversas acciones y de la temperatura corporal, necesita de un motor que la mantenga activada permanentemente. Esta función esencial la cumple el corazón. El sistema se completa con los conductos o vasos sanguíneos, que son las arterias, venas y capilares; y el fluido que transita por ellos, la sangre.
El sistema circulatorio es la suma del sistema cardiovascular y el linfático.
La sangre, penetra en todas las partes del cuerpo, gracias a que posee una bomba muscular llamada corazón y una red de tubos conocidos como vasos sanguíneos (arterias, venas y capilares).
El sistema circulatorio
consta del corazón, y de las arterias y venas que transportan la sangre por todo el cuerpo.
La sangre siempre debe circular para mantener la vida. Transporta oxígeno del aire que respiramos a las células en todo el cuerpo. El bombeo del corazón mantiene en movimiento este flujo sanguíneo a través de las arterias, los capilares y las venas. Un grupo de vasos sanguíneos hace circular la sangre a través de los pulmones para el intercambio gaseoso. Los otros vasos alimentan el resto del cuerpo.
1. Hay dos tipos de circulación:
Circulación pulmonar y circulación sistémica
La circulación pulmonar moviliza la sangre entre el corazón y los pulmones. Transporta sangre desoxigenada a los pulmones para absorber oxígeno y liberar dióxido de carbono. La sangre oxigenada luego regresa al corazón.
La circulación sistémica moviliza la sangre entre el corazón y el resto del cuerpo. Envía sangre oxigenada a las células y permite el retorno de la sangre usada y con desechos al corazón.